Se viene un nuevo juego fuera de casa, y para eso se prepara el plantel de Gabriel Schurrer. Que es conciente de lo que se viene, y que el equipo no debe relajarse y seguir sumando dentro del torneo. Un certamen corto, de muchos partidos en un lapso menor, hacen que los esfuerzos se multipliquen. Pero también es cierto que si metes un par de resultados buenos, las cosas se pueden definir lo antes posible y trabajar con mayor tranquilidad.

Pasada las 10 de la mañana, los futbolistas se presentaron ante los profes Gustavo Zubeldia y Daniel Jara, para comenzar con los trabajos del día. Trabajos de fuerzas, con y sin elementos por largos minutos, donde fueron rotando en grupos en trabajos específicos. A la hora de saltar al campo, los que jugaron frente a Sarmiento, realizaron trotes por las canchas 1 y 2 del predio en Santa Inés, y los demás integrantes del plantel llevaron a cabo trabajos de definición.

En cuanto a los lesionados, Claudio Fileppi evoluciona cada vez más de su dolencia en la rodilla, Tobías Figueroa trabaja a la par de sus compañeros, tras el susto también en una de sus rodillas, y los demás están en condiciones para ser tenidos en cuenta por el entrenador para visitar a Patronato. Salvo el lateral derecho, claro está,, hablamos de “tarrito” Pérez quien se fue expulsado ante los de Junín y deberá purgar una fecha de suspensión por doble amarilla.

Seguramente cuando el plantel vuelva este miércoles a los trabajos, Gabriel Schurrer comenzará a sacar reales conclusiones del probable equipo para visitar al patrón. Seguir con la confianza de visitante, sería un factor determinante para traerse un buen resultado de Paraná. El plantel de Crucero está preparado para lograr dicho cometido. Está en manos del cuerpo técnico y jugadores planificar bien el encuentro y volver a sumar, para seguir prendido en el lote de arriba.